Los magnates Aranda (Vic. Pte. del Grupo Clarín), George Soros y la casta feudal de los primos Colombi (Gobernador y ex) quieren represar el paradisíaco arroyo Ayuí, afluente del Miriñay y éste a su vez del Uruguay, para irrigar mega-arroceras. Amparados en una reciente “Ley de bosques” provincial que les da vía libre. Tal proyecto acabará en pocos años con todos los bosques nativos de la provincia y herirá de forma irreparable su bio-diversidad. Construirían una laguna artificial que ocupará, al principio, el doble de extensión que la laguna Iberá. La mitad que la ciudad de Buenos Aires. Las arroceras volcarán sus efluvios contaminantes a las aguas, y afectarán las napas y el aire, la agricultura a pequeña y mediana escala, el turismo, con ellos los servicios, etc. Y nos atan por décadas al sub-desarrollo. La cantinela es la de siempre: “Desarrollo” “Progreso” ¿Para quién? Para estos capitalistas. Para el pueblo, es miseria contaminación y muerte. Corrientes es la segunda provincia más pobre del país según el INDEC. Estudios serios indican que en mayor o menor medida todos los correntinos bebemos agua contaminada. El cáncer creció exponencialmente. “Ayuí grande” es sólo uno de los problemas que tenemos que enfrentar. También, y quizás lo más grave, sean las rajaduras de Yaciretá, que prueban videos “deslizados”. Si se desmoronara, en minutos el agua llegaría hasta la mitad del Obelisco, constituyendo la mayor catástrofe de la historia argentina. Luchamos contra la instalación de nuevas represas (Garabí o Corpus en Misiones); contra la instalación de mega-pasteras de Botnia-UPM (hace instantes Kristina declaró de interés público la producción de pasta celulósica). También elaboramos planes de reciclaje. En todas partes llamamos a la unidad de las luchas populares.
El MST de Corrientes lucha codo a codo con ambientalistas y luchadores honestos, en la mayor diversidad, contra el genocidio ambiental.
Cristian González.
MST Paso de los Libres
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